Travesía de los 3000 ibones en 5 etapas por libre

Descubre la majestuosidad de los Pirineos en la travesía de los 3000 ibones, posiblemente la ruta de senderismo más espectacular de España

Los 3000 ibones en vivac en 5 etapas: la ruta más impresionante de los Pirineos

Los Pirineos, ese impresionante cordón montañoso que divide España y Francia, alberga algunos de los paisajes más espectaculares de Europa. Entre las múltiples maravillas que se encuentran en esta región se destaca la travesía de los 3000 ibones, un desafío para los amantes del senderismo y la naturaleza. En este artículo, te llevaré en un recorrido emocionante y te mostraré la belleza incomparable que te espera al embarcarte en esta travesía, comenzando desde los Baños de Panticosa.

Los 3000 ibones es un trekking circular en Pirineos, transfronterizo y por etapas, que recorre un territorio de montaña espectacular: el valle de Tena y el Circo del Ara en el Pirineo Aragonés, y los valles de Ossau, Arrens, Marcadau y Gaube en la vertiente francesa. Una ruta circular por una de las mayores concentraciones de ibones (lagos de montaña) de los Pirineos bajo los imponentes macizos de Balaïtous y Vignemale, atravesando la Reserva de la Biosfera Ordesa - Viñamala y el Parc National des Pyrénées.

La ruta original está diseñada para realizarse en 6-7 jornadas, con un refugio guardado esperándonos a la finalización de cada etapa, resultando una media diaria de algo más de 15 km y casi 1.100 m. de desnivel positivo. Nosotros nos decantamos por la modalidad QUEBRANTA, la más completa de todas las que ofrecen, añadiéndole a mayores la ascensión a un 'tresmil' relativamente sencillo y cercano: el Petit Vignemale, y con la dificultad añadida de hacerlo en una etapa menos (5) y por libre, sin la utilización de los refugios para dormir, aunque si los utilizamos como puntos de avituallamiento. Más adelante detallaré todo el material y la comida que necesitamos para completar con garantías una travesía de tal magnitud en 5 días, intentando a su vez que el peso de la mochila fuese el menor posible.

Los Baños de Panticosa: El punto de partida perfecto. Ubicados en el corazón del Valle de Tena, los Baños de Panticosa son un complejo termal rodeado de montañas majestuosas. Este lugar paradisíaco es el punto de partida ideal para emprender la travesía de los 3000 ibones. Antes de comenzar la aventura, puedes aprovechar para relajarte y rejuvenecer en las aguas termales, preparando tu cuerpo y mente para los desafíos que te esperan en los próximos días. Es aquí donde se ubica el primer refugio de montaña de la travesía, el único al cual se puede acceder en coche, el refugio Casa de Piedra. Nosotros optamos por dormir en furgoneta camper en el parking, una amplia explanada bien nivelada, llena de sombras y con una tranquilidad absoluta por la noche para dormir.

Día 1. Baños de Panticosa - Arrieles

Desde el Balneario de Panticosa subimos por la GR-11 hacia el Refugio de Bachimaña. Se trata de una ascensión de unos 4km y unos 400 m. de desnivel positivo en el que podremos disfrutar de un precioso valle rodeado de montañas graníticas y bellas cascadas. Una vez en el refugio aprovechamos para hacer una primera parada para comer algo y continuamos. Tras rodear el enorme Ibón de Bachimaña nos dirigimos hacia los Ibones Azules (2300m) y su idílico paisaje bajo los Picos del Infierno. Desde aquí es imprescindible echar una vista hacia atrás y observar todo el valle por el que discurre el rio que baja de los Azules al Bachimaña.

Desde aquí afrontaremos la última parte del ascenso hasta el Cuello del Infierno (2721m), por una senda serpenteante que discurre por un paisaje pedregoso. Rodearemos el Ibón de Tebarray hasta alcanzar el collado con su mismo nombre. Aquí comenzaremos el descenso, con unos primeros metros en los que necesitaremos toda nuestra atención, pero que disponen de cuerda fija para facilitar la bajada. Continuaremos bajando hasta alcanzar el Ibon de Liena Cantal (2300m), otro magnífico lugar para hacer una pequeña parada en el camino. Las vistas al macizo del Balaïtous durante todo el descenso son un regalo para nuestros sentidos.

Continuaremos bajando hasta alcanzar el Refugio de Respomuso (2220m), ubicado junto al gran ibon de Respomuso, al cual llegamos tras los primeros 15 kilometros de la travesía. Nosotros decidimos continuar para buscar un sitio donde dormir. Cercana a la presa, sale una bifurcación a la derecha, la senda de la "Subida a los Arrieles", que seguiremos durante uno 4kms más, hasta alcanzar una bonita pradera con un corro de paredes de piedras para vivaquear, junto a un pequeño ibon donde poder darnos un baño para relajar los músculos y quitarnos el sudor acumulado de toda la jornada.

Día 2. Arrieles - Cabane de Doumblas

Comenzamos la jornada bordeando los ibones de Arriel Bajo y Arriel Alto, antes de ascender hasta el Col d’Arrémoulit (2448m), que nos servirá para atravesar la frontera e iniciar la travesía por territorio francés. Descenderemos hasta el Refugio d’Arrémoulit y su lago, donde podremos aprovechar para hacer una primera parada.

Desde Arrémoulit descendemos al gran Lac d’Artouste (2009m), que rodeamos por la izquierda, y enlazamos con el camino que sube a los Lacs de Carnau (2205m). Desde estos lagos afrontamos una nueva cuesta para alcanzar el Col d’Artouste (2463m) y sus increíbles vistas. Solo nos queda la bajada del puerto, cómoda y rápida, y rodear el Lac de Migouélou hasta alcanzar su refugio (2283m). Aquí aprovecharemos para repostar energía antes de descender casi 1000m a traves de infinitas zetas hasta llegar al Plan d’Aste (1377m) y su frondoso bosque surcado por el río Arrens. Esta zona de Francia es una zona muy húmeda, que posiblemente encuentres bajos las nubes, con lo que la variedad de paisajes y ambientes se torna aún más increible.

Seguimos valle arriba, primero por un frondoso bosque y posteriormente por un valle más abierto a lo largo del río Arrens, pasando por el Lac de Suyen hasta alcanzar la bonita cabaña de Doumblas, donde decidimos dormir, ya que de no ser así, con la alta humedad del ambiente, hubiera sido algo más complicado todo a la hora de montar/desmontar tienda. El refugio está bien cuidado y posee un litera de madera para 3 personas.

Desde aquí comienza la subida que nos llevaría hasta el Refugio de Larribet, 6km ida y vuelta y algo más de 400m de desnivel positivo. Nosotros decidimos no hacerla, ya que al estar bajo las nubes, no hubieramos podido disfrutar de las vistas. Además de no depender del refugio ni para dormir ni para comer.

Día 3. Cabane de Doumblas - Plateau du Clot

Comenzamos el día con la remontada del Arrens pasando por los Lacs de Remoulis hasta llegar al collado del Port de la Peyre de Saint Martín (2.295 m). Aquí encontramos un cruce y tomamos el camino a Cambalès, ahora con pendientes más fuertes y entre canchales de piedra. Una vez en el Col de Cambalés (2.706 m) disfrutaremos de la panorámica del Balaïtous y de los Lacs de Cambalès, en la otra vertiente, hacia donde nos dirigimos.

Comenzamos el descenso, rodeando el circo por la izquierda, por una pendiente que se irá volviendo más suave hasta llegar a los numerosos lagos de Cambalès en un ambiente muy alpino y pedregoso. La vista del Vignemale en el horizonte nos ofrecerá un espectacular paisaje característico de la cara norte de los Pirineos en el Parque Nacional francés. Pasamos varios kilómetros por encima de los 2.000 metros para terminar la jornada bajando por un flanco del barranco de Cambalès y un bosque de pinos negros hasta el idílico Pla de La Gole y el Refugio de Marcadau (Wallon). Cuando nosotros hicimos la travesía, este estaba en obras y no pudimos utilizarlo para comprar algo de comida.

Proseguimos la aventura descendiendo, ahora sí, por un camino muy cómodo por el valle de Marcadau, a través de un frondoso bosque y siempre junto al río, hasta El Clot y su refugio, donde decidimos acampar en una zona cercana a este. Deciros que intentamos que nos dieran de algo de comer, ya que esta etapa llegamos algo bajos de energía, pero por unos minutos, habían cerrado la cocina, y nos nos pudieron dar nada. Andar con ojo con lo horarios si contáis con los refugios para comer o cenar.

Día 4. Plateau du Clot - Los Batanes

Comenzamos descendiendo hasta Pont d’Espagne, confluencia de Marcadau y Gaube, donde podemos disfrutar de sus impresionantes cascadas. Continuamos remontando el largo Vallée de Gaube por un tramo de bosque que enseguida nos acercará hasta el inmenso Lac de Gaube y su Hôtellerie. En la terraza del hotel, a orillas de este lago de aguas turquesas, podemos aprovechar para recuperar algo de energía con la estampa del Vignemale al fondo.

Reiniciamos la marcha rodeando el lago, y seguimos ganando altura progresivamente dirección al Vignemale. Tras un primer tramo con árboles y cascadas pasamos a praderíos que recorremos hasta llegar a Les Oulettes, la plana bajo el Vignemale (3.298 m) y uno de los rincones más espectaculares de toda la travesía, donde se encuentra el refugio des Oulettes de Gaube (1.992 m).

Llegamos a este punto una hora antes de que abriera la cocina, asi que decidimos comer algo rápido, dejar las mochilas, y modo trail-running, hacer un ascenso rápido hasta el Petit Vignemale (3.032 m), unos 10km ida y vuelta y unos 1000 m de desnivel positivo. No es una ascensión fácil por el desnivel que cubres y el cansancio acumulado de los días anteriores, pero personalmente si que recomiendo muy mucho esta opción, aun utilizando un día a mayores, porque las vistas desde la cima del Petit Vignemale son realmente espectaculares.

Una vez abajo y después de que nos dieran de comer, continuamos recorriendo la explanada de Les Oulettes acercándonos al glaciar y la espectacular pared de la cara norte del Vignemale, considerada una de las más grandes paredes de los Pirineos. Enseguida tomamos un camino que sale a la derecha para afrontar la última subida de la jornada, muy directa, hasta el Puerto de los Mulos (2.591 m) y admirar a las crestas que cierran el circo del Ara. Esta subida, después del ascenso y descenso al Petit Vignemale, fue uno de los momentos más duros de la travesía.

Descendemos a la cabecera del valle, lugar salvaje en estado puro donde nace el último río virgen de los Pirineos: el río Ara. Desde el circo bajamos unos kilómetros el valle de infinitas praderas por la margen derecha del río hasta que decidimos montar nuestro campamento para la última noche de la travesía, con unas vistas espectaculares de todo el circo del Ara.

Día 5. Los Batanes - Baños de Panticosa

El día se presentaba oscuro y tormentoso, por suerte habíamos dejado para el final una etapa cortita. Continuamos bajando hasta conectar con el GR11 en el cruce de dos barrancos y el Ara. Siguiendo este GR11 comenzaremos a ascender por un terreno pedregoso. Tras contornear los pequeños Ibones de Batanes atravesamos una zona de bloques antes de coronar el Puerto Viejo de Brazato y sus grandes ibones.

En todo este ascenso nos pilló la tormenta de lleno, con una fuerte lluvia al principio, para continuar poco después con una granizada que cubrió en pocos minutos el suelo de blanco, y con una fuerte tormenta eléctrica. Por cosas como estas, hay que darle la importancia que se merece a la preparación correcta de la mochila, puesto que igual estamos sufriendo un calor insoportable un día, como otro estamos sumergidos de lleno en medio de una tormenta, con el problema que tendría que todo el material quedara mojado para siguientes etapas.

Bajamos rodeando los Ibones de Brazato (2.265 m) y tras ellos continuamos perdiendo altura sin descanso, en una larga bajada hasta el Balneario de Panticosa (1.600 m).